
Existen algunos mitos respecto al embarazo y los dientes, muchos de los cuales generan dudas de parte de las mujeres embarazadas.
El principal mito, o la principal frase que dice una mujer que ha tenido hijos y tiene la boca en mal estado es “cada hijo me costó un diente“.
Como todo mito, hay algo de verdad y mucho de mentira. Es posible que una mujer haya perdido un diente (o más) durante el embarazo, pero no tienen porqué echarle la culpa al pobre bebé que no tiene NADA que ver con eso.
Les voy a explicar un poco que es lo que pasa durante el embarazo respecto de los dientes. El tema es más o menos así:
La caries es la descalcificación del diente provocada por los ácidos de la placa bacteriana. Para que ésta ocurra necesitan darse dos circunstancias:
Que quede placa bacteriana sobre los dientes un tiempo prolongado y que haya alimento que las bacterias descomponen en ácidos.
Con respecto a que la placa bacteriana se quede un tiempo prolongado sobre las piezas dentarias, es muy simple, es solo cuestión de lavarse los dientes!!
La fundamental causa de que haya más alimento para las bacterias es que las embarazadas se la pasan comiendo cosas, generalmente dulces y normalmente a cualquier hora. Lo que provoca una baja del Ph constantemente.
La solución es muy simple: no es que no pueden comer dulces, que los coman, pero que se laven los dientes luego, y a conciencia!
Otra cuestión que puede ayudar a la aparición de las caries en el primer trimestre del embarazo está ligada a los vómitos. No todas las embarazadas sufren nauseas matutinas y menor es la cantidad que tiene vómitos, pero en aquellas en que eso ocurre, se genera una situación continua de acidificación del medio bucal (se pone mas ácido producto del ácido clorhídrico que está en el vómito) que contribuye a la descalcificación dentaria. Cosa que puede evitarse aseándose la boca después de haber tenido algún vómito.
Segundo Mito: el mas usado por las mujeres: “me llene de caries porque el bebé me saco todo el calcio de los dientes“.
MENTIRA!! Bajo NINGUN punto de vista eso puede ocurrir.
La explicación es la siguiente: Los dientes NO intercambian calcio con el resto del cuerpo. El único reservorio de calcio que existe en el cuerpo está en los huesos. El organismo debe mantener siempre una concentración determinada de calcio en la sangre. Cuando baja la concentración de calcio en la sangre, el organismo le saca el calcio a los huesos (de ahí viene la osteoporosis), pero los dientes no tienen esa característica.
Es cierto que el bebe toma más calcio de la sangre de la madre, pero eso no trae aparejada la descalcificación de los dientes. Una vez que se forman, los dientes No intercambian iones (como el calcio) con el organismo salvo una pequeña capa superficial del esmalte, elemento que se aprovecha con las topicaciones de flúor para mejorar la calidad del esmalte superficial.
Tercer mito: Durante el embarazo no se puede atender odontológicamente.
Incorrecto, En cualquier etapa del embarazo se puede realizar la atención odontológica. Si bien se recomienda que los trabajos con anestesia se realicen en el segundo trimestre, lo más recomendable es que Ni bien se confirma el embarazo, hacer un control para ver que no halla caries, de manera de poder curar todas lo antes posible.
Otra cuestión que puede ocurrir durante el embarazo es el sangrado excesivo de las encías.
Si bien hay una mayor carga hormonal y un mayor volumen y flujo sanguíneo producto del embarazo, está todo relacionado con lo que dije antes.
Las encías se inflaman cuando queda placa bacteriana pegada a la unión de la encía con los dientes (el cuello dentario). Como su nombre lo sugiere, la placa bacteriana esta compuesta entre otras cosas por bacterias. Estas bacterias generan una irritación en la encía que conlleva a su inflamación. Cuando la encía esta inflamada, se hicha y se pone muy roja, eso es porque ha aumentado la irrigación. Al tocarla con el cepillo, se produce la ruptura de vasos sanguíneos que producen la hemorragia (el sangrado). Incluso si la inflamación es muy excesiva, puede producirse sangrado espontáneo (si tocar las encías, sangran solas).
La solución es mas fácil de lo que parece. Si sacamos la causa se soluciona todo, y cuál era la causa?? La placa bacteriana.
Esto es un concepto importante, no solo para las embarazadas.
Cuando uno se cepilla no tiene que hacerse tan fuerte como para hacer sangrar las encías, pero tampoco tiene que evitar que sangren. Muchos pacientes se lastiman las encías de tanta fuerza que hacen con el cepillo, y a muchos otros les da impresión que sangren las encías así que no se tocan con el cepillo. Las dos cosas generan daños casi irreversibles.
Uno tiene que higienizarse los dientes y las zona de la encía normalmente. Si la encía sangra, es que la vez anterior nos higienizamos mal, y eso generó que quede placa bacteriana, con la posterior inflamación de la encía.
Entonces en toda zona donde vean que sangre la encía, tienen que higienizarse MEJOR, no más fuerte sino más tiempo y con más dedicación para remover la placa bacteriana. Cuando se elimine la placa bacteriana, la encía deja de tener la irritación y en uno o dos días se desinflama sola.
Las embarazadas tienen una predisposición mayor a formar caries, principalmente por el aumento de la ingesta de Hidratos de Carbono (dulces).
Esta situación es neutralizable de manera muy sencilla EXTREMANDO las medidas de higiene oral.
Por lo general mis pacientes embarazadas terminan su embarazo sin ninguna caries. Eso es gracias a que acudan a su cita semestral para control y limpieza dental, y rigurosamente se realizan tres veces por día la higiene de sus dientes en forma minuciosa. Con esto quiero decir que no sirve un cepillado de 30 segundos. Debe durar 2 minutos y asegurarse de pasar por todos los dientes en todas sus caras.
Como les digo: es fácil terminar el embarazo sin caries, si acudimos semestralmente a revisión y limpieza dental, solo hay que tomar conciencia que todo depende de los hábitos que tomemos, tanto benéficos (higiene) como prejudiciales (golosinas) y no se olviden que NO es que NO PUEDEN COMER GOLOSINAS, cómanlas, pero después a lavarse los dientes.
Espero que les sirva y por favor difundan estos conceptos, para que podamos mejorar un poco más la salud bucal de las personas.